El nene de 11 años de edad que cató de la baranda de la pileta del club Independiente murió en la madrugada de ayer en el hospital Enrique Vera barros de la ciudad capital, hacia donde había sido derivado desde nuestra ciudad luego de la caída. Los padres decidieron donar los órganos del pequeño. Los profesionales le diagnosticaron muerte cerebral y desde entonces permaneció internado en la Capital. El equipo de CUCAILAR trabajo con los padres para ver el tema de la ablación y el nene murió en la madrugada de ayer y se le extrajeron los órganos para donarlos. Hoy a las 10 sus restos fueron sepultados en nuestra ciudad con una gran concurrencia de amigos, familiares y transeuntes acongojados.
El lamentable accidente sucedió sábado pasado, en la pileta del Club Atlético Independiente donde se desarrollaba una fiesta privada, que desafortunadamente culminó de la peor manera, ya que un menor sufrió un accidente que le produjo heridas que lo llevaron a su posterior fallecimiento.
Entre los invitados a esta fiesta particular se encontraban un grupo de menores de entre 11 y 13 años, quienes en determinado momento se dirigieron a jugar hacia la zona de la pileta del club.
Según trascendió, uno de los menores, se encontraba apoyado en una de las barandas de los alrededores de la pileta.
Al parecer esta baranda cedió y el menor cayó hacia atrás desde una altura de 2 metros aproximadamente, sufriendo graves heridas en la zona posterior del cráneo.
El menor fue asistido rapidamente por el personal del Servicio de Emergencias 107, quien lo trasladó de urgencia al Hospital Eleazar Herrera Motta.
Ya en el hospital el menor fue examinado por los doctores a cargo y quedó internado en el Servicio de Terapia Intensiva.
Lo unico que se pudo saber es que sufrió traumatismo de base de cráneo y que su estado de salud era reservado.
El menor, de 11 años, identificado como Ignacio Ponce y se esperaba que su evolución sea favorable. No obstante a ello, también se aguardaba que desde la ciudad Capital de La Rioja arribe un equipo de profesionales médicos, entre ellos un neurocirujano, a los efectos de analizar si era conveniente su traslado a otro centro asistencial o arbitrar los medios que permitan mejorar el estado grave de salud que presentaba el menor.
Así, el menor fue derivado al hospital Enrique Vera Barros, donde en la madrugada de ayer dejó de existir, aunque el noble gesto de su familia permitirá mejorar la calidad de vida de otras personas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario